Una calle trampa es un término con el que se define a una calle falsa añadida a un mapa por un cartógrafo para poder pillar a posibles infractores de derechos de autor.
Clara Oswald usó el término para referirse a una calle de Londres que se encontraba oculta ante el público debido al uso de un circuito de desorientación. La calle era un campo de refugiados alienígena supervisado por la Alcaldesa Yo. La entrada estaba situada en un callejón estrecho entre dos edificios de una calle importante (en uno de los edificios había un pub). Aunque la calle estaba situada en la Londres del siglo XXI, su apariencia se asemejaba más a un entorno del siglo XIX. Los humanos que accedían a la calle sin querer eran detenidos por un campo de fuerza, recibían una dosis de algo similar a un Retcon para que se borrasen sus recuerdos más recientes y salían del lugar.
El lugar tenía una serie de leyes muy estrictas que sus habitantes cumplían para no ser sentenciados a muerte por la Sombra Cuántica. Los que eran sentenciados recibían un chronolock que contaba los minutos hasta su ejecución, momento en el que la Sombra Cuántica en forma de cuervo volaba hacia ellos para acabar con sus vidas. Así murieron al menos un hombre y Clara Oswald. (TV: Face the Raven, Hell Bent)